El confinamiento, y las sucesivas fases de desescalada que iremos afrontando en las próximas semanas, conllevan que afrontemos el estudio y el ejercicio físico de forma distinta. Las siguientes recomendaciones pueden ser muy útiles para lograr el éxito.

¿Cómo volver a estudiar a un ritmo adecuado?

Si bien las costumbres previas a este periodo siguen siendo imprescindibles, no estaría de más que:

  • Se apostara por la redacción de esquemas de cada tema con el único objetivo de convertirlos en un interesante recurso memotécnico.
  • No se intentara recuperar el tiempo perdido en unas semanas. Es mejor ir poco a poco, pero siempre con una planificación eficaz para afrontar los exámenes correctamente.
  • Es importante compartir las dudas con otros estudiantes y consultar a los profesores al respecto.

¿Qué tipo de actividad física es más conveniente?

Si durante el confinamiento no se ha realizado deporte, sería aconsejable comenzar paseando añadiendo más distancia de forma progresiva. Posteriormente, sí se podría empezar a correr o a hacer ejercicio físico al aire libre que exigiera un mayor esfuerzo físico.

De no practicar deportes al aire libre, es imprescindible que realices a diario una tanda de estiramientos y que elijas los ejercicios de yoga o pilates más acordes a tu estado físico para mantener el tono muscular.

Combinando los consejos anteriores, no te será nada complicado amoldarte a la normalidad venidera sin tener que afrontar secuelas físicas demasiado complicadas de superar. Todo sea por volver a ser la persona que fuiste antes de una pandemia que ha cambiado tus costumbres y formas de afrontar tu rutina de estudios y deportiva durante estos últimos meses.